miércoles, 8 de marzo de 2017

Materiales grupo 1

1. Introducción: racionalismo frente a empirismo

Descartes ya no considera válido como criterio de verdad al argumento de autoridad. Todo criterio de verdad debe ser fundado en la razón, por lo que funda la corriente  filosófica  del racionalismo. No es una corriente nueva, puesto que encontramos antecedentes en la filosofía de Platón. Pertenecen también a la corriente racionalista autores como Malebranche, Espinosa (Spinoza), o Leibniz. Sus influencias en la filosofía idealista como la de Kant y Hegel será también decisiva.
La filosofía empirista es "la otra" gran corriente de la filosofía moderna, y sus mayores representantes son John Locke y David Hume.

1.1. EL EMPIRISMO

En 1620 la obra llamada Novum Organon de Sir Francis Bacon afirmaba que debíamos crear una nueva ciencia que permitiera transformar la naturaleza para mejorar la vida humana. Esa nueva ciencia se basaba en el uso de los sentidos y la experimentación.  Francis Bacon es el antecedente de la filosofía empirista.


1.2. ALGUNOS FILÓSOFOS EMPIRISTAS

John Locke nace en 1632 en Bristol (Inglaterra), en el seno de una familia liberal. Fue desterrado por sus ideas políticas. Durante su exilio desarrolló su filosofía, bajo la influencia de Bacon y Descartes. Su obra el Ensayo sobre el Entendimiento Humano, donde se pregunta por el alcance del conocimiento humano, funda el empirismo. Su filosofía política, expuesta en Dos tratados sobre el gobierno civil fue muy influyente. Murió en 1705.
David Hume nace en Edimburgo (Escocia), en 1711. Su familia era pobre, pero bien relacionada. Su padre quería que se dedicara al comercio familiar, pero él se aficionó a la filosofía y se marchó a Francia. Allí llegó a alcanzar bastante notoriedad como intelectual, pero nunca pudo trabajar como catedrático universitario porque fue considerado peligroso por sus ideales ilustrados. Muere en el año 1776.



2. ORIGEN Y CONSTITUCION DE LA EXPERIENCIA

Los empiristas decían que podemos conocer solamente aquello que podemos experimentar. Por experiencia se refieren a “lo que se vive”. Las distintas vivencias que poseo me proporcionan las ideas, y esas ideas son lo único que yo conozco. Mi conocimiento es un conocimiento de ideas que proceden de la experiencia. Aunque hay cosas que no son directamente experimentables, como por ejemplo, los números, estos se conocen por generalización y abstracción a partir de la experiencia.

Para Locke, si la experiencia es externa  se producen ideas de sensación (los colores, el calor, lo blando, etc.), mientras que si la experiencia interna se producen ideas de reflexión (pensar, creer, dudar, conocer, querer, etc).

¿De dónde se hace la mente con esa prodigiosa cantidad (de ideas) que la imaginación limitada y activa  del hombre ha grabado en ella, con una variedad casi infinita? ¿De donde extrae todo ese material de la razón y del conocimiento? A estas  preguntas contesto con una sala palabra: de la experiencia; he  aquí el fundamento de todo nuestro saber, y de donde en última  instancia se deriva: 'las observaciones que hacemos sobre  los objetos  sensibles externos,  o sobre  las operaciones internas de nuestra mente las cuales percibimos y sobre las que reflexionamos nosotros mismos, son lo que proveen a nuestro entendimiento de todos los materiales del pensar". Estas son las dos fuentes de conocimiento de donde parten todas las ideas que tenemos o que podamos tener de manera natural.
J. Locke, Ensayo sobre el Entendimiento Humano, Cap.I,2



Para Hume todas nuestras relaciones con la realidad nos vienen dadas a través de lo que él llama percepciones.

Llamo percepción a cualquier cosa que pueda presentarse a la mente, sea que empleemos nuestros sentidos, o que nos impulse la pasión, o que ejercitemos nuestro pensamiento y reflexión.
D. Hume, Compendio de un Tratado de la Naturaleza Humana

Todo lo que tengo en mi mente son percepciones, que se clasifican en: impresiones e ideas. Las impresiones son lo que llega a nuestra mente en el momento en que estamos experimentando algo, mientras que las ideas son las huellas o los recuerdos que dejan en nosotros las impresiones. Las impresiones son más vivas, presentan más detalles; las ideas son más borrosas.

La primera proposición que anticipa, es que todas nuestras ideas, o percepciones débiles, son derivadas  de nuestras  impresiones, o percepciones fuertes, y que nunca podemos pensar en cosa alguna que no hayamos visto fuera de nosotros, o sentido en nuestras propias mentes.

D. Hume, Compendio de un Tratado  de la Naturaleza Humana



3.  CRITICA AL INNATISMO Y AL CONCEPTO DE CAUSA.

2.1. CRíTICA AL INNATISMO

Los racionalistas afirmaban la existencia de las ideas innatas, porque para ellos era la única manera de justificar la existencia de conocimientos universales y absolutamente validos, pero Locke presenta dos argumentos en contra.
A) En primer lugar, no hay ideas universales: los niños y los débiles mentales carecen de ideas como las del principio de Identidad o del  principio de No contradicción, que para las racionalistas son ideas innatas:

... todos las niños no tienen la mas mínima aprehensión o pensamiento de aquellas proposiciones, y tal carencia basta para destruir aquel asenso universal,  que por fuerza tiene que ser el concomitante necesario de toda verdad innata. (...). Si,  por supuesto, los niños y los idiotas tienen alma, quiere decir que tienen mentes con dichas impresiones, y será inevitable que las perciban y que necesariamente conozcan y asientan a tales verdades; pero como esto no sucede, es evidente que no existen tales nociones

J.Locke, Ensayo sobre el Entendimiento Humano. Intr.5

B) En segundo lugar, algún racionalista podría decir que las ideas innatas están ahí, aunque no nos demos cuenta. Pero entonces, ¿como es posible que si las ideas innatas están impresas en mi mente yo no las haya detectado jamás?

Además, me parece caso contradictorio decir que hay verdades impresas en el alma que ella no percibe y no entiende, ya que estar impresas significa que, precisamente, determinadas verdades son percibidas, porque imprimir algo en la mente sin que se le perciba me parece poco inteligible. (...) Porque, si no son nociones naturalmente impresas, entonces ¿cómo pueden ser innatas? Y si efectivamente son nociones impresas, ¿cómo pueden ser desconocidas? Decir que una noción está impresa en la mente, y afirmar al tiempo que la mente la ignora y que incluso no la advierte, es igual que reducir a la nada esa impresión.

J.Locke, Ibidem

(3ª Sesión)

3.2. LA CRITICA A LA IDEA DE CAUSA

La idea de causa, y el principio de causalidad son básicas para la metafísica y la ciencia: permiten relacionar algo que ocurre con un efecto que se produce a continuación. Es decir, enseña que hay una conexión necesaria entre la causa y el efecto, de manera que siempre que se da la primera, se da el segundo, o siempre que se ve el efecto es porque previamente se ha producido la causa.
Un ejemplo en la metafísica la podemos ver en Aristóteles. Él observaba la existencia de  movimiento (efectos) e infería que la causa de los mismos era  el  Motor  Inmóvil.
La aplicación en la ciencia es muy evidente, porque siempre está buscando las causas de los fenómenos, por ejemplo,  busca las causas de terremotos.

Hume  piensa  que los filósofos  tradicionales han estado haciendo algo ilegitimo al dar por evidente el principio de causalidad, porque la idea que tenemos de causa es confusa, porque no corresponde a ninguna impresión.

-Actividad para casa: comentario de texto.

He aquí una bola de billar quieta sobre la mesa, y otra bola que se mueve  hacia ella con rapidez.  Las  dos chocan;  y  la bola  que anteriormente estaba en reposo adquiere ahora un movimiento. Esta es una tan perfecta instancia de la relación de causa y efecto como cualquier otra que conozcamos, sea por sensación o por reflexión.
Examinémosla por tanto. Es evidente que las dos bolas entraron en contacto antes de que fuese comunicado el movimiento, y que no hubo intervalo alguno entre el choque y el movimiento. La contigüidad en tiempo y lugar es, por tanto, una circunstancia requerida para la operación de todas las causas.  Es evidente similarmente que el movimiento que fue la causa es anterior al movimiento que fue el efecto. La prioridad en tiempo es, por lo tanto, otra circunstancia requerida en toda causa. Pero esto no es todo, probemos con otras bolas del mismo género en una situación similar, y siempre hallaremos que el impulso de la una produce movimiento en la otra. Hay aquí, por lo tanto, una tercera circunstancia, a saber, la de una conjunción constante entre la causa y el efecto. Todo objeto similar a la causa, produce siempre algún objeto similar al efecto. Más allá de estas tres  circunstancias  de  contigüidad,  prioridad,  y  conjunción constante, nada puedo descubrir en esta causa.

D. Hume, Compendio de un Tratado...


No podemos encontrar la nota más característica de la idea de causa: la conexión necesaria entre la causa y el efecto. Pero,  si no hay conexión necesaria,  entonces no tengo ningún derecho a considerar absolutamente verdaderas ni las predicciones, ni  as explicaciones. Esto equivale a decir que no podemos conocer nada.   Estas  conclusiones  hicieron  que  Hume  desembocara en el escepticismo.